La decisión fue hasta el límite para no sobrepasar la legalidad.
La liberación de nuevos calibres y la posibilidad de que los menores de 18 años puedan practicar tiro deportivo sólo con permiso de uno de los responsables (antes era necesaria autorización judicial) son puntos a celebrar, señaló en un reportaje al portal brasileño Valor el presidente del Movimiento Viva Brasil, Bene Barbosa
Para el profesor Barbosa este decreto del Presidente Bolsonaro es incomparablemente mejor que el primero que había dictado el gobierno, que solo se refería a la tenencia de armas. “El primero fue considerado bastante tímido. Yo mismo lo critiqué bastante. Este no, fue realmente mucho más amplio, mucho más profundo, que trae respuestas a varios pedidos que venían siendo realizados por quienes defendemos el derecho a la tenencia y portación de armas de fuego”, señaló Barbosa en la entrevista.
Preguntado respecto de cuáles eran los puntos más positivos del Decreto, Barbosa, señaló que “el primero fue la liberación de calibres, puesto que hasta el decreto, el ciudadano quedaba restringido al calibre.38 para revólver y .380 para pistola. No creía que esto sucedería, aunque fuera un pedido nuestro. A ello se le agrega la liberación de la portación para algunas categorías de usuarios como los tiradores deportivos entre otros y por supuesto la posibilidad de que los menores de edad puedan practicar tiro deportivo, un problema muy serio que en la práctica hacía que los jóvenes comenzran a practicar tiro deportivo a partir de los 18 años.”
Entre los aspectos negativos del Decreto, Barbosa resaltó que el decreto no podía cambiar leyes (NR. Algo que en Argentina sucede a menudo en esta materia) Una de ellas es la cuestión de la edad mínima de 25 años para la portación, que obligatoriamente solo puede ser modificado a través de una ley. La segunda cuestión es la amnistía que permitiera regularizar la cantidad de armas que tienen o tenían registros en las policías estatales, pero que no fueron registradas en la Policía Federal. El mercado gris como se lo llama en Argentina, donde la problemática es similar desde hace tiempo y que por obra y gracia del sistema monopólico de exámenes médicos se agrava día a día.
En la entrevista, Barbosa coincide con la opinión del ministro Sergio Moro quién dijo que el decreto no tiene que ver con la seguridad pública, sino una decisión de Bolsonaro en atención al resultado de las elecciones. “Estoy totalmente de acuerdo. En el pasado, el Bolsonaro aún como candidato, cuando hablaba de esa liberación, era acusado entre comillas de presentarlo como una solución para la seguridad pública. Nunca lo fue. Para solucionar la seguridad pública, son necesarias cosas mucho más contundentes, mucho más profundas. Una de ellas es el paquete anticrimen de Moro, que estoy seguro absoluta que traerá buenos resultados. Pero paralelamente puede haber una mejora en la seguridad con la tesis que, desde el momento en que el criminal sabe que puede encontrarte armado, va a preferir delitos en los que no haya contacto con las víctimas.”
Por supuesto que quienes están con el desarme afirman que el decreto es anticonstitucional y que conforme a la doctrina de Viva Rio que se conoce por nuestras tierras llevará a un aumento de los accidentes interpersonales y al aumento del mercado ilegal por aquello de que, toda arma ilegal antes fue legal. Barbosa, ya acostumbrado a este tipo de preguntas señaló que “los decretos anteriores que propusieron las restricciones ahora retiradas tampoco habían pasado por el Congreso” y en relación al otro punto “Creo que está más que probado que los criminales no necesitan el mercado legal para abastecerse. Después de 13, 14 años del Estatuto del Desarme, no hubo ninguna disminución del arsenal criminal. Por el contrario, ha crecido bastante en los últimos años. Entonces no tengo ese miedo. En cuanto a los accidentes, teniendo en cuenta que comprar y principalmente portar un arma de fuego todavía requiere una serie de cuestiones legales, burocráticas, de control, yo no temo por ello. Lo que la gente tiene de experiencia es que casi siempre las armas que son instrumentos de accidentes son ilegales, en manos de personas que no tienen responsabilidad”.
Finalmente, Barbosa que defendió una flexibilización más general de la portación de armas, hoy restringida para las 20 categorías profesionales contempladas, señaló que el criterio le pareció “razonablemente adecuado pues son categorías que ya venían buscando ese derecho hace años”. “De todos modos, creo que será muy interesante medir los efectos de esta medida, algo que podremos hacer de aquí a un año. La Policía Federal tendrá todos los datos para hacerlo.”
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