Una aventura en el cerro Corona de Huinganco.
Los bellos paisajes del Norte Neuquino atesoran rincones únicos que merecen la pena conocerse desde adentro, desde su más pura esencia. La mejor forma de hacerlo es a través del modo más primitivo… paso a paso disfrutamos de otra manera, desde otra perspectiva, apreciando cada detalle bajo las sensaciones que nos transmiten todos nuestros sentidos.
Pablo Marcelo Oscar es guía de trekking y trabaja en la provincia de Neuquén hace varios años: «tengo 46 años, junto a mi esposa tenemos 3 hijos. junto a ellos disfrutamos la naturaleza. Trabajo por la mañana en la administración pública y en el tiempo restante le dedico a mi pasión.»
Nacido en El Bolsón, desde pequeño se sintió atraído por la aventura y la montaña: «en una salida con amigos fuimos a recolectar frutillas silvestres y en una lomada veo a los lejos mi escuela. La veo muy chiquita. La gente caminando alrededor parecían como hormigas y eso me impactó mucho. El ver la escuela y el playón de juegos desde la altura me dejó sorprendido. Ese suceso creo que fue mi primer motivación, sumado al hecho de haber nacido en un ambiente de montaña. A medida que iba creciendo comencé a hacer mucho deporte y a ascender montañas, incursionando desde las pequeñas hasta las más altas; así llegué al Aconcagua, fui 3 veces y las 3 veces hice cumbre. Esta pasión, creo que no tiene techo, mientras el cuerpo me lo permita seguiremos ascendiendo montañas.! afirma Pablo
A comienzo de la temporada Pablo llevó un grupo de trekkers a Cerro Corona (o La Corona como lo identifican los pobladores) localizado en la bello pueblo del Norte Neuquino; Huinganco. Una experiencia inolvidable para todo el grupo: paisajes maravillosos que dejaron sorprendidos a todos, descubiertos en una aventura inolvidable. El Cerro Corona, tiene casi 3000 metros, es parte del cordón formado por la Cordillera del viento que comienza a los pies de la localidad de Andacollo. «Si bien resulta un trekking que se puede hacer en el día, prefiero realizar un pernocte para que la experiencia sea mucho mejor, no solo por el desgaste físico sino porque la vivencia que implica pasar la noche en la montaña.. poder apreciar el atardecer y el amanecer no tiene comparación alguna! El descanso lo hacemos a la orilla de la laguna donde nace el arroyo Huinganco. El color de la laguna es realmente encantador, la paz y tranquilidad que allí se respira no tiene precio.
Allí descansamos, nos hidratamos, y preparamos una cena calentita antes de ir descansar a las carpas. Al otro día salimos temprano, con las primeras luces hacia la parte más alta de la Cordillera del Viento. Por una especie de planicie se llega finalmente a la cumbre, previo paso por unas pequeñas elevaciones donde yace el hito que indica el punto más alto del cerro Corona. Luego de hacer cumbre se desciende, se desarma el campamento, y volvemos al camping de Huinganco y donde nos esperan con un rico chivito y empanadas para terminar la jornada y después volver a casa.» nos relata Pablo.
Pablo realiza travesías en distintos circuitos de la provincia durante todo el año: En el centro de la provincia hace el trekking en el valle del Calleu Mallehue cerca de La Atravesada, pasando la cordillera del Chachil a 50 km. de Zapala, donde está Primeros Pinos; la travesía comienza en el valle de Sainuco, un sitio histórico de la provincia, donde se originó la conocida «Matanza de Sainuco» en 1916, de presos que huían de la Unidad Penitenciaria 9 de Neuquén capital. «Este paisaje es un ámbito de crianceros que utilizan los valles como veranadas para sus animales: montañas hermosas, llenas de pehuenes, lengas, ñires, y al fondo, bien abajo el arroyito del Calleu Mallehue, donde habita el mítico pato de los torrentes, una especie amenazada, que en oportunidades hemos tenido la suerte de poder observarlo. Otro circuito por la zona es la cordón del Chachil, donde yace el cerro homónimo, dentro del recorrido se encuentran una serie de lagunas de distintos tonos turquesas rodeadas de paisajes y panorámicas maravillosas». Otras travesías que Pablo organiza para los más avezados, es volcán Lanín, Tromen y cerro Domuyo.
Pablo ama la montaña, tiene un vínculo muy estrecho con ella, disfruta cada paso, cada momento que le brinda. Todo queda grabado y cada anécdota incrementa su experiencia y alimenta sus valores: el trekking te da mucho; condición física, salud mental, alegrías… la montaña te muestra lo mejor y, en ocasiones, lo peor del ser humano. También te permite conocer lugares que de otra forma no podrías llegar a conocerlos. Sentir la felicidad que te da la sensación de estar caminando en paisajes totalmente remotos donde no hay otras personas en kilómetros, es maravillosa!
Este verano agendá las actividades de turismo aventura que nos ofrecen los prestadores de actividades como Pablo, y viví tu propia aventura en los paisajes únicos y encantadores que ofrece la provincia de Neuquén, de la mejor manera…
Gracias Pablo!
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