En los primeros 4 meses de 2020 creció un 252% respecto de 2019.
El aumento equivale al registro de 48.300 nuevas armas.
En los primeros cuatro meses de este año, la Policía Federal otorgó 48.3 mil nuevos registros para armas de personas en todo el país, un número 252.3% mayor que los 13.7 mil registros de 2019, cuando Bolsonaro ya gobernaba y ya había una tendencia al alza.
El total general de registros emitidos, que incluye armas de agentes de seguridad públicos y privados, así como renovaciones de registros, creció un 9.7% entre los primeros cuatro meses de 2019 y el mismo período de este año, de 61,710 en 2019 a 67,695 en 2020
El crecimiento se dio en todos los estados según se observa en el siguiente cuadro publicado por Metrópoles.
Hay estados con aumentos significativos en el número de nuevas solicitudes de registro, como Río de Janeiro , donde el número aumentó de 346 en los primeros cuatro meses de 2019 a 4,687 en el mismo período de este año, 1,254% más.
Otro caso que llama mucho la atención es el del Distrito Federal, donde la PF aceptó 190 solicitudes a principios del año pasado y 2.307 a principios de este año, un aumento del 1,114%.
En números absolutos, Bahía es el estado que registró la mayor cantidad de armas nuevas para los ciudadanos en 2020. Hubo 5,447 entre enero y abril de este año, un aumento del 978% en comparación con los primeros cuatro meses del año pasado, cuando 505 armas pasaron a manos de ciudadanos en el estado.
Brasil mejora sus índices de seguridad. Aumentó la muerte de delincuentes y bajó la de inocentes.
“Avanzó en la administración de Bolsonaro, incluso porque es una agenda histórica para él, pero la adquisición sigue siendo muy costosa y extremadamente burocrática. Se necesitan entre R $ 6 mil y R $ 7 mil para obtener la autorización y comprar un arma para tener en casa”, indicó el presidente del Movimiento Viva Brasil Bene Barbosa, quien goza de influencia en los alrededores del presidente y busca ayudar con aspectos técnicos, pero admite que las dificultades son grandes.
“Bolsonaro ha encontrado grandes obstáculos tanto en el Congreso como en el Poder Judicial, e incluso dentro de las Fuerzas Armadas, donde hay personas con grandes prejuicios contra la expansión del acceso a las armas para la población”, señaló Bene. Sin pasar por el Poder Legislativo, sin embargo, es difícil avanzar en el tema del tipo de arma, por ejemplo.
Para Barbosa, sin embargo, todavía hay caminos que se pueden tomar fuera del Congreso para permitir que Bolsonaro tome más medidas para cumplir su promesa. “Como una ordenanza interministerial para firmar un acuerdo entre PF y los departamentos de seguridad pública del estado y racionalizar el proceso de autorización para la adquisición de armas de fuego que hoy solo se hace en la Policía”, concluyó.
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