De camping en balsa
La novedosa forma de hotelería flotante belga.
Voltkamp es una ingeniosa forma de hotelería que se ha puesto de moda entre los amantes de la naturaleza. El concepto que quiere decir literalmente ‘camping en balsa’, forma parte del hotel Polderwind ubicado en el lago Flandes, Bélgica.
La idea que han hecho realidad Tobias Knockaert y Kika Merlin es básicamente el ala flotante del mencionado hotel. Esta consta de 8 balsas carpas, a las que solo se puede acceder a través de un bote o canoa.
Esta iniciativa muy parecida a la llamada Boomkamp, que la pareja de creadores inauguró el año pasado a lo largo de un camino forestal cerca de Brujas, en la zona de los pirineos, es un proyecto que se centra en la aventura. Esta ingeniosa forma de hostelería invita a los huéspedes a revivir sus sueños de la infancia, al tiempo que crear atracciones turísticas originales en Bélgica que sirven de vía de escape a toda la pesadilla de la pandemia y los rígidos patrones que esta ha obligado a implementar en la industria hotelera.
24 metros cuadrados de aventura
Gracias al éxito que ha tenido su iniciativa Boomkamp (un hotel que recrea la experiencia de la casa del árbol) Tobias Knockaert y Kika Merlin se dieron cuenta de que la gente está interesada en alojamientos alternativos que les ofrezcan, más allá de un lugar en donde dormir, una experiencia única.
Pensando en ello, Knockaert y Merlin decidieron desarrollar este concepto hotelero que consta de 8 balsas, en las que se tienen instaladas carpas de 24 metros cuadrados. La idea era crear un alojamiento sencillo que ofreciera una opción distinta e inolvidable a los visitantes del hotel Polderwind.
El resultado final es una suerte de ala flotante del hotel, en forma de pequeña aldea en medio del lago. Cada balsa/habitación está hecha de 5 módulos flotantes con una carpa de Sibley.
Poner el ingenio a prueba
Los ingeniosos emprendedores diseñaron un exoesqueleto personalizado, lo suficientemente fuerte para soportar las más extremas condiciones de verano. Hechos con madera y llantas recicladas, los dispositivos flotantes son estables y muy resistentes a los golpes.
No obstante, la pareja tuvo que superar varios problemas técnicos para hacer realidad esta novedosa propuesta hotelera. En primer lugar, tuvieron que resolver el problema de fondeo, y además de esto lo referente a la iluminación y confort (cama, baño, etc.).
Para darle solución a lo primero, decidieron anclar solo una esquina de la balsa. Con esto lograron minimizar las fuerzas del viento. Resultado: toda la balsa actúa como una bandera y gira alejándose de la dirección del viento.
En cuanto a la comodidad, el interior de la balsa tiene un colchón circular doble tamaño King, rematado con unos bonitos cojines y un montón de acogedores elementos decorativos, que proporcionan mucho confort a la estancia. Adicionalmente, en el exterior la balsa tiene 2 asientos al aire libre y una mesa pequeña, para aquellos que quieren disfrutar de una velada romántica o de una noche estrellada en el vaivén del lago.
En cuanto al tema “baño”, cada dispositivo cuenta con un inodoro a bordo, para casos de emergencia nocturna. Para los huéspedes que han elegido esta aventurera opción, el hotel Polderwind dispone, en tierra, de baños completos con duchas y lavabo, además de un restaurante con servicio de buffet y un bar.
Como característica adicional, el Voltkamp del Polderwind, tiene una unidad accesible para sillas de ruedas, la cual está cercana en la orilla. Así pues, si es de los que quiere empezar a introducirse en el mundo de la aventura, esta puede ser una suerte de puerta de entrada con mucho estilo.
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