La configuración de mi arco
Nota publicada en Revista Aire Libre 49 – Octubre 2021
ILF significa International Limb Fitting, que en castellano sería Sistema de Encastre Internacional.
Hasta los años 80, los diferentes fabricantes de arcos desarrollaban diferentes soluciones para el encastre de palas en los mangos de los arcos; hasta que la empresa Hoyt desarrolló el sistema que sería luego el estándar a nivel global permitiendo la intercambiabilidad de palas y mangos entre diferentes marcas.
La practicidad del sistema llevó a que aun fabricantes de arcos clásicos lo incorporen, siendo el método preferido en las competencias por los arqueros de élite de la flamante división Tradicional de WA.
Con motivo del comienzo de la temporada de sala luego de la suspensión por la pandemia, me encontré en la necesidad de reconfigurar mi recurvo ILF para la división Bowhunter de IFAA, donde participo habitualmente.
Algunas veces lo hago con el longbow, pero con el recurvo permitido en la categoría las posibilidades de mejorar el récord personal son mayores, por eso mi elección. Me pareció entonces una buena idea contar el proceso en esta nota para que los lectores puedan tomarlo como referencia o guía en la configuración de sus arcos del mismo sistema.
Mi idea era armar un equipo que me permitiera estar muy competitivo, pero de la manera más simple posible. Por eso opté por un rest plástico Hoyt, sin button. Menos partes significa menos ajustes y menos chances de fallas. Con la adecuada elección de flechas para sala (Easton GG500) pude prescindir de dicho elemento.
Por mi experiencia en temporadas anteriores con diversos mangos opté por quitar el grip original y envolver la zona descubierta del mango con un cubregrip de raqueta de tenis. Una solución muy práctica para manos grandes que siempre me brindó mucha comodidad.
Finalmente, al mango le incorporé un contrapeso en la rosca principal delantera para mejor balance y estabilidad. Recomiendo siempre probar con diferentes pesos, ya que pueden afectar favorablemente o en forma negativa la salida de la flecha.
Con el mango listo coloqué las palas (¡siempre con armador!) para luego chequear su alineamiento en relación al mango. En este caso no hizo falta corregir nada, pero el sistema de regulación del mango permite ajustes laterales.
Luego con las roscas principales del sistema ILF establecí un tiller neutro de palas y le quité una libra de tensión para asegurarme la salida más limpia posible de la flecha y comodidad en mi tiro. El tiller es la relación de distancia de la pala con la cuerda. En el caso de ser neutro es la misma para ambas. Una opción popular entre arqueros que toman la cuerda con tres dedos debajo, como yo.
Es importante remarcar que, si bien estoy siendo sintético en el proceso con fines didácticos, en la práctica y sin experiencia puede resultar un poco confuso, y lograr el resultado esperado puede demandar varias configuraciones para comparar y definir en base a prueba y error.
No hay una receta única para todos los arqueros, pero encontrar la propia puede ser un camino de gran aprendizaje que vale la pena recorrer.
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