San Martín de los Andes, luces y sombras
El boom del turismo interno y su impacto en una zona privilegiado de nuestro país. Por Guillermo C. Muttoni.
Luego de casi dos años de “encierro” en el ahora llamado territorio del AMBA viajar a alguno de los hermosos lugares que tiene nuestro país era casi una necesidad. Y así fue como en el mes de diciembre decidimos, junto a mi señora, aprovechar la excelente oportunidad que nos ofrecía el PRE VIAJE. San Martín de los Andes no fue nuestra primera opción, pero fue el único lugar que tenía pasajes aéreos disponibles de las 3 o 4 opciones que habíamos considerado. A lo largo de nuestra estadía de 10 días creo haberlo comprendido. Quienes van al sur lo hacen mayoritariamente con movilidad propia. Ya verán porqué.
No obstante lo arriba expuesto el avión de Aerolíneas Argentinas fue y vino con todos sus asientos ocupados. En el viaje de ida me sorprendió la presencia de varios pescadores provenientes de los Estados Unidos que venían a probar suerte en nuestros lagos y ríos patagónicos. Una clara muestra de la importancia que tiene para el sur la promoción de la pesca. Promoción que no pude observar en los anuncios oficiales. Si, en las agencias de viaje que promocionan salidas de pesca. Debo reconocer también que no vi a nadie pescando por los muchos lugares que recorrí.
Hacía unos años que no iba a San Martín de los Andes, y cuando estuve fue por pocos días. Así que lo primero que hicimos fue pasar por la Secretaría de Turismo local para que nos informen las distintas alternativas de paseos. Si bien nos atendieron bien, la información no sirvió de mucho. Creo que los dos folletos que nos dieron solo los vi en una oportunidad. Más nos sirvió la información que nos dio nuestro hijo Nicolás que había estado allí en en 2021.
Así que lo primero que hicimos fue ir a una agencia de viajes. No quedaba otra alternativa pues estábamos sin movilidad propia y sin posibilidad de alquilar un vehículo por dos razones: la primera y fundamental no había autos disponibles; la segunda es que si hubiera habido tampoco podría haberlo alquilado porque como muchos residentes de la Ciudad de Buenos Aires tengo el registro vencido, pero prorrogado solo para el AMBA?! , así que las compañías más serias no lo aceptaban.
Las excursiones
Excursión Lago Huechulafquen y Volcán Lanín
Contratamos una excursión (pagada con Pre-Viaje) que ofrecen todas las agencias y que consiste en ir hasta el pie del volcán Lanín. Su precio a febrero 2022 – $.5600.- por persona. Una combi que parte desde San Martin de los Andes, que visita la ciudad de Junín de los Andes, para luego pasar por la boca del icónico Río Chimehuín, que nace en el Lago Huechulafquen. En todo el recorrido se observan las distintas caras del Volcán Lanín con su pico cubierto por un glaciar. Más adelante y bordeando el Lago, abandonamos la zona de estepa para internarnos de lleno lo profundo del bosque andino-patagónico.
La excursión tiene una parada para almorzar en un restaurant de campo atendido por gente de la comunidad mapuche, pero que en nuestro caso fue un lunch en una playita cercana. Luego se retoma la ruta 61 hasta llegar al paradisíaco Lago Paimún junto a la Capilla del lago en un bosque puro de araucarias milenarias, al pie del Volcán Lanín. Todo espectacular y de una belleza única. Lástima que se tenga que hacer todo por camino de ripio, que no está en mal estado, pero que no deja de ser incómodo.
Excursión al Lago Meliquina, Paso Córdoba y Villa Traful
Una excursión solo apta para vehículos 4×4 o como en nuestro caso en combi, en cuyo caso tiene un costo de $.6500.- por persona. Aún cuando se han comenzado los trabajos de asfalto entre la ruta 40 y Villa Traful el circuito de imperdible belleza es intransitable. Caminos de la época del Perito Moreno en el siglo XXI. La excursión bordea el Lago Lacar, luego la RP 63, y llega hasta el Lago Meliquina, el cual se bordea hasta llegar a la Villa Meliquina, y la naciente del río homónimo donde se pueden observar alevines de truchas recorriéndolo.
Luego se cruza el rio Filo Hua Hum y el desvío al lago Filo Huam, ubicado a 4 kms, uno de los espejos de agua más impactantes, para luego continuar a la vera del Rio Caleufu, para llegar a una caverna natural llamada Casa de Piedra.
Luego comienza el Paso Córdoba, un ascenso zigzagueante, que culmina en un punto panorámico. El descenso atraviesa un valle, que corre paralelo al rio Traful, que se une con el rio Limay, dando origen al paraje Confluencia Traful, para llegar hasta la hermosa Villa Traful. Enclavada en el P.N. Nahuel Huapi, la cual es sin duda una de las más atractivas localidades turísticas de la región. Una pena los caminos.
Excursión lacustre a Hua Hum
Desde el muelle de la ciudad se aborda una embarcación que recorre los lagos Lácar y Nonthue a un costo de $.7500.- por persona. Con la capacidad máxima de 100 personas partimos a las 11 horas, en un barco debidamente inspeccionado por Prefectura que en su nivel superior no tenía salvavidas y en la parte inferior los tenía pero detrás de una jaula cerrada e inaccesible en caso de emergencias.
Más allá de este pequeño detalle, la excursión es muy atractiva y con una guía de turismo muy amena y didáctica, que nos permitió disfrutar del paseo de 28 km aproximadamente que cuenta con varias paradas en las cuales se desciende del barco y con tiempo disponible para almorzar, caminar, comprar productos artesanales o simplemente contemplar el paisaje para finalizar en el comienzo del rio Hua Hum, casi en el límite con Chile.
Una de las paradas es en la zona residencial y playas de Quila Quina, sobre la margen sur del lago Lacar, donde se puede disfrutar de sus playas y almorzar en el resto-bar o en alguna de las playas. La siguiente parada es en el Puerto de Chachín, en la margen sur- oeste del lago Nonthue, donde luego de un trekking (exigente para los mayores) se accede a la Cascada del rio Chachín, un salto de agua de unos 30 mts de altura en medio de la Selva Valdiviana.
El punto final de la navegación es en el Puerto Hua Hum, a metros de la boca del rio Hua Hum. Aquí y a solo 4 kms se encuentra el paso limítrofe con Chile, (el paso más bajo sobre la cordillera, a unos 640 msnm). La última parada, ya de regreso, es en la Isla Santa Teresita que se encuentra en el lago Lacar, una isla de costas rocosas y cubierta de vegetación típica de los bosques andino patagónicos. La isla tiene una pequeña Capilla con la imagen de Santa Teresita del Niño Jesús, que le da el nombre a la isla.
Traslados a Quila Quina
Para los que tenemos auto, hay dos formas de llegar a Quila Quina a pasar el día. Por barco a $.3000.- por persona o por taxi que te lleva y luego te pasa a buscar a un costo muy similar según la compañía. Si el taxi no llega, allí pasaras la noche. Así que fuimos en barco.
Quila Quina es una villa turística, formada en la década del 40 donde hoy conviven las propiedades privadas y la propiedad comunitaria de la Comunidad Mapuche Curruhuinca, de ocupación ancestral.
La isla es ideal para pasar el día. Muchas playas, tranquilas, ideales para andar en canoas, kayaks, bote o practicar stand up y también kitesurf en las más ventosas. Los barcos van y vienen repletos, por lo que la vuelta puede complicarse.
Adicionalmente si vas en barco, hay que pagar el acceso a Parques Nacionales. Si vas en auto, no pagas nada.
Trekking a la Islita
El lugar está ubicado a pocos kilómetros de la ciudad. El camino de ripio (otra vez) imposibilita llegar en autos normales, solo algunas 4×4 se animan y por supuesto lo rompen más. Las combis no van y los taxis menos. Por ello no queda otra forma que caminar. A mitad del camino está el mirador de Bandurrias.
Para pasar allí la comunidad Lof Mapuche Curruhuinca (Personería Jurídica N° 3505) cobra un acceso de 150$. Nuestro ticket llevó el número 22419. Una recaudación más que importante para que alguien se haga cargo de reparar el camino. Llegarían más personas.
Otras playas
Dentro del Parque Nacional Lanín se encuentran sobre el Lago Lácar una serie de playas realmente hermosas a las que se accede únicamente en auto propio o en taxi, obviamente sobre un camino de ripio. No hay transporte público hacia ellas y tampoco fluvial. Increíble que la mayoría no tenga muelles. Es como si quisieran “seleccionar” al tipo de visitante. Una de esas playas es la de Yuco a la que se mencionaba como la más linda. Y puede ser cierto. Solo observar desde el barco que nos llevó a Hua Hum la cantidad de gente que allí había, me exime de mayores comentarios. No pudimos ir.
También, y por las mismas razones, nos quedamos sin conocer la Playa Bonita, sobre el Lago Lolog.
Conclusión
Nos gustaron muchísimas cosas de San Martín de los Andes, no solo los lugares arriba descriptos. La limpieza de sus calles, la oferta gastronómica, el respeto a los peatones que van a cruzar la calle (obviamente por conductores de todo el país que se pelean por atropellar a todo aquel que intente cruzar), sus flores, la seguridad, su clima, la cordialidad de los locales, etc. También me gustaría que se acomode la oferta turística a quienes llegan sin movilidad propia, algo que me parece no interesa mucho.
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