La temporada se abre desde finales de otoño hasta el invierno
Un resumen de la información sobre las reglas, los cazadores y el número de presas capturadas. Hay recompensas entre 20 y 25 mil yenes para cazar jabalíes y ciervos.
En principio, el periodo de caza en el año fiscal 2022 se extiende del 15 de noviembre de 2022 al 15 de febrero de 2023 (del 1 de octubre al 31 de enero en Hokkaidō). La caza es una actividad estrechamente asociada a la vida de los pueblos de montaña, y el gibier (carne de animales silvestres) es parte integrante de la cultura alimentaria tradicional de muchas regiones.
Los cazadores deben estar en posesión de una licencia de “caza con escopeta”, “caza con armas de presión”, “caza con trampa” o “caza con red”, y deben inscribirse como cazadores en la prefectura donde deseen realizar su actividad.
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Además, si desean practicar la caza con armas, están obligados a contar con una licencia para armas de fuego.
El número de titulares de licencias de caza pasó de más de 500.000 en la década de 1970 a unos 200.000 en torno al año 2000, y desde entonces se ha mantenido prácticamente invariable. El envejecimiento de los cazadores ha progresado, y en los últimos años casi el 60 % de los titulares de licencias tienen 60 años o más.
Dado el aumento de los daños que las aves y otros animales están provocando en los cultivos, el Gobierno central y las corporaciones locales se están esforzando por fomentar y asegurar los recursos humanos para nuevos cazadores.
El jabalí y el ciervo son las presas mayoritarias
En el pasado, la caza de aves silvestres como faisanes y patos por su carne ocupaba la mayor parte de la caza en Japón. Sin embargo, en la actualidad, la caza mayor, que tiene como objetivo a los jabalíes y ciervos que causan daños a los cultivos, se ha convertido en lo principal.
Según el Ministerio de Medioambiente, el número de jabalíes capturados en 2021 alcanzó los 528.600 y el de los ciervos llegó a 725.000. Además de la caza pura, esta cifra incluye resultados como los proyectos de “exterminio de la vida silvestre nociva” de los gobiernos locales, etc. El número de osos capturados en el año fiscal 2021 superó los 4.500.
El Gobierno se ha fijado el objetivo político de reducir a la mitad para 2023 la población de jabalíes y ciervos, que en 2011 ascendía a 4,13 millones. También se ha introducido un sistema de pago de “recompensas” de unos 20.000 yenes por jabalí capturado y 25.000 yenes por ciervo, incluyendo los subsidios de los Gobiernos central y locales.
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