Aranceles ANMAC 2023

El Costo de un trámite subió un 20.000%

La medida comenzará a regir el próximo 1 de febrero.

Dentro de un contexto generalizado de aumento de aranceles establecido en la Disposición 204/2022, que derogó el esquema de aranceles vigentes desde 2017 y lo reemplazó con un nuevo cuadro tarifario que supera largamente la inflación (de 600% registrada en el periodo), hay casos que llaman poderosamente la atención.

La mayoría de los aumentos desproporcionados de aranceles está intenta restringir la actividad comercial, a encarecerla de tal manera que obligue a cerrar los comercios, o bien a subir los precios de los materiales haciéndolos inaccesibles a la mayoría de la población. Pero hay excepciones, y una de ellas es la denuncia de la pérdida o recuperación de un arma de fuego, cuyo precio pasa de los actuales $50 a los futuros $10.000. Ambos por cada arma.

¿No debería ser gratuito?

El artículo 15 de la Ley 20.429 de armas y explosivos cuya sanción data de 1973, establece que “Todo usuario de «armas de guerra» está obligado a comunicar a la autoridad competente las sustracciones, extravíos y pérdidas inmediatamente de producidos, sin perjuicio de la denuncia que pueda o deba hacer a la policía o a la justicia”. Una obligación razonable para aquella época donde no había una base de datos nacional en línea entre sedes policiales y organismo de control. Claro que esta obligación no se extendía hacia las armas de uso civil, que en aquel momento eran registradas exclusivamente en sede policial.

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Por ello el Artículo 129 del Decreto 395/75 amplió la obligación de la denuncia de la sustracción, extravío o pérdida del material ante la autoridad local de fiscalización; la cual por el Artículo 130 está obligada a informar de tal situación al ex Registro Nacional de Armas, hoy ANMAC.

Recién por Ley 25.938 del año 2004 se creó el Registro Nacional de Armas de Fuego y Materiales Controlados, Secuestrados o Incautados.

Nada dice la Ley de armas ni el decreto reglamentario de la obligación de los legítimos usuarios de armas respecto a informar de la recuperación del material.

Por ello, 50 años después de sancionada la Ley de Armas, donde las bases de datos, la velocidad de las comunicaciones y hasta el propio CUIM deberían generar información unívoca, rápida y de calidad, ¿Es razonable castigar por duplicado y hasta por triplicado con aranceles abusivos a quienes sufrieron primero una pérdida económica a causa de la inseguridad reinante,  segundo a pagar $10.000 para informarle a ANMAC y eventualmente tercero obligarlos a pagar otros $10.000 a ANMAC si se tiene la fortuna de recuperar el material?. Parecería que NO, pero nada de este fenomenal e injustificado ajuste aparece como razonable.

Por último, ni que hablar de los tiempos que tarda el Organismo en levantar un pedido de secuestro o en devolver el arma encontrada al titular de la misma. La demora no está arancelada.

Por ello está claro que si las autoridades de ANMAC así lo decidieran, este trámite DEBERIA ser bonificado en un 100%. De lo contrario cualquiera puede decir “Me robaron y encima tengo que pagar para informar que me robaron y si la recupero pagar otra vez”.

Otra irracionalidad con la que este bendito país no deja de sorprendernos, y van… 

Cuadro comparativo de aumento de aranceles 2023

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